viernes, 15 de octubre de 2010

Lucas 11:23 . El límite de la libertad

"El que no está conmigo, contra mí está; y el que conmigo no recoge, desparrama"

Es penoso y hasta podría añadir que doloroso, a nivel personal, que la influencia ideológica  de este país este llegando a limites de ideofobia.

En dos días he tenido que escuchar varias veces como se me calificaba de extremista (de derechas, por supuesto), franquista y hasta me han llegado a decir que con ideologías como la mía así nos iba en este país.

Se que escribir esta entrada me está poniendo a la misma altura de aquellos que me han calificado así, y que podría parecer que esto es como una manera de justificar como pienso y como opino, y no hay cosa más lejos de mi intención.

No voy a entrar a valorar la ideología política de aquellos que hicieron semejantes comentarios, aunque ellos libremente han opinado sobre la mia sin conocimiento, porque no creo que sea necesario. Pero en el momento que me puse a reflexionar sobre el porque se decían estas cosas, me vino a la mente automáticamente la cita del Evangelio según San Lucas 11:23.

Claro que ahora, si esos que me han calificado de esa manera leyeran esta entrada, podrían añadir también lo de “además católica”, que parece ser que es otro de los calificativos que están más de moda para atacar a aquellos que no opinan como ellos.

Creo que hace ya muchas entradas tuve un una entrada en este blog sobre lo que yo entendía por valores personales, que no morales y lo que significaban para mi estos.

¿Y qué es lo que yo valoro? la integridad, la igualdad (en todos sus aspectos), la educación, el respeto y la libertad.

La integridad como modo de presentar todo aquello que es uno mismo, con unos principios de valoración del yo y de los demás en todos los ámbitos de la vida personal.
La igualdad, en todos y cada uno de los aspectos de nuestra vida.
La educación libre y bien pensante, al más puro estilo renacentista. Sin topes, ni cortapisas y una amplitud que deje atrás cualquier tipo de partidismo, seasé político, religioso y hasta moral.
El respeto. Es decir, el reconocimiento de que todos y cada uno de nosotros, con sus ideas, sus conocimientos y hasta sus valores. Y exijo lo mismo para mí.
La libertad. Ha costado mucho el poder vivir en un país en el que se pueda dar una opinión personal, como para dejar de valorar la libertad. La represión de cualquier modo y el estado inhibitorio de las personas no tiene lugar en ningun estado personal.

Y ante todo esto no dejo más que asombrarme de que todavía haya personas que no dejen de hacer las valoraciones sobre mi persona con una libertad a la hora de expresarse que ellos mismos no aplican a los demás. Y de ahi el recordario de la cita de San Lucas "el que no está conmigo, contra mi está".

Y esto parece ser que es lo que hoy está más en boga. O estas conmigo o eres de extrema derecha. Como si a una no le dieran las neuronas como para llegar más allá de todo esto, como si lo que los demás opinen sea la verdad absoluta del universo y tu fueras el último gran "emperador pseudocualquiercosa", digno de la más negra página de la vida misma.

Esos que presumen de libertad, igualdad, humanidad, educación, etc etc etc están cayendo en los mismos agujeros que critican. Y ahora podría añadir como ellos, ...............y así nos va.

PD- Y no puse la Inteligencia, porque ese valor se presupone, y  por lo que, etimológicamente significa; inteligente es quien sabe leer o escoger.

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