viernes, 16 de octubre de 2009

Necedades...........Román Antonio Alvarez

Hacía mucho tiempo, bueno mucho no, un poco que no tenía un despertar con cafetito, cigarrito y los dos periódicos de rigor y me reía tanto.
En el primero que leí, la risa se fue dibujando en mi cara, apareciendo como un atisbo de medio cachondeo según iba leyendo las líneas de la noticia. Pero la reseña, por tan breve, no me dejó mucho espacio a la carcajada. Así que ni corta ni perezosa abrí el otro diario, el del pueblu, y fue cuando la carcajada me salió con tal sonoridad que hasta los pececitos del acuario, que están un pelín adormilados por lo del frío, se quedaron pegados al cristal mirándome, cual si fuera un extraterrestre............
Y es que, la noticia de marras, tiene miga. El concejalucu Román Antonio Alvarez, se nos va a meter a monaguillo..................Biblia en mano y leyendo las Sagradas Escrituras cual si fuera un aprendiz sacerdotal en pleno ensayo del sermón dominical. ¡Que pena Dios mio de haberme perdido semejante momento histórico!. El tomador de notas de aquellos que defienden su ideología religiosa ha pasado a ser redentor de almas descarriadas. ¡Dios nos pille confesados!
Pero al menos hay que darle un puntin a favor de que haya ascendido en su nivel intelectual de lecturas, al pasar de hacer citas cubanas a leer la Sagrada Biblia.
A continuación, y tras un primer ataque de risa, seguía yo leyendo la Voz de Avilés para conseguir entender el brutal cambio de actitud del susodicho cuando llegué al claro entendimiento del por qué de tal cambio de sentimiento religioso. Tenía que justificar la petición del incremento en el presupuesto de unos dineros que se parecen demasiado en el número y cantidad (137.007,91 €) a los que la rumorología comenta que ha despendolado, sin poder aún justificar del inconmensurable fiasco del verano. Y claro ante la imposibilidad de decir para que son no le ha quedado otra que pedir la ayuda divina de San Pablo, Apóstol de los Gentiles, porque el tiempo corre y se queda sin días para justificar lo injustificable.
Y una espera, que como al citado Apóstol, el Concejal tenga una clara reconversión. Y para que tome nota este sujeto, y en ánimo mañanero espléndido aquí le pongo para que estudie, el relato que aparece en los Hechos de los Apóstoles, sobre la reconversión de San Pablo (por si le fuere de ayuda):
"Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón. Él, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Y los hombres que iban con Saulo se pararon atónitos, oyendo a la verdad la voz, mas sin ver a nadie. Entonces Saulo se levantó de tierra, y abriendo los ojos, no veía a nadie; así que, llevándole por la mano, le metieron en Damasco, donde estuvo tres días sin ver, y no comió ni bebió."
Nota: Sr. Concejal, cambie Damasco por Avilés y Saulo por Román para que lo entienda mejor en un afán de ayudarlo en la reconversión.
Tras esta lectura, lo único que me queda añadir es darle mi más sentido pésame a la Sra. Carmen Vega por tener que aguantar semejante individuo en el Consistorio, con toda su sarta de burradas, faltas de educación e insultos a su persona, que hasta dan que pensar en que parecen más amenazas que simples contestaciones en el juego político (parecen de ámbito personal y racistas, puesto que siempre atacan a la condición de mujer de la concejala en un ejercicio de machismo desmesurado del Sr. Álvarez).
Luego sigo más que me tengo que ir a comprar el pan............... jijijii

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